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La casa de cartón |
Es la primera obra que escribe, aunque algunos como Luis Vargas Durand consideran que escribió versos antes de dicha obra pero que nunca se publicaron, la empezó cuando tenía 16 años y muestra a un Martín Adán naciente.
La Casa de Cartón a pesar de su publicidad sólo salió en edición privada con dedicación personal, para algunos de los amigos del autor; tiene el prólogo de Luis Alberto Sánchez y el colofón de José Carlos Mariátegui. La obra es una pequeña obra maestra de ironía, finura de observación e invención verbal, el mismo Martín no la considera una novela, sino una serie de estampas del Barranco de su niñez. Donde no hay personajes, diálogos, solo descripciones y una manifestación de su gran habilidad para describir paisajes y situaciones, manifestando la facilidad con que emplea los sinónimos y su vasto lenguaje. Martín Adán, en “La casa de cartón” inaugura la renovación estética, que acentúa en sus Antisonetos. La casa de cartón sonríe surrealistamente de la vida provinciana, de la limeña, del balneario, de las viejas criollas, de los tranvías con su contradictoria carga de rutina y fuga.
La obra es un medio para describir la época, la política y hasta la religión de una manera crítica, distante y hasta burlona. La obra es un recorrido por su infancia, tiempo de colegio, los primeros amores, todo visto de un punto de vista crítico.
Martín Adán |
La casa de cartón es una pequeña obra maestra de ironía, finura de observación e invención verbal es que en la obra hay, como guardados en silo, la espuma de una infancia sencilla y el confuso alborear de un adolescencia sabia. Está allí sin falsedades ni gazmoñerías. Arropados en lirismo de buena salud y en centelleos anarquistas, de clara y destinada ironía. En feliz torneo de imágenes la ternura y el humor se confunden a veces o pugnan en otras.
Fue una de las mejores obras de la narrativa peruana de esa época y que destaca por su evocación del balneario de Barranco, con una trama apenas esbozada, que transcurre a través de cuadros de las vivencias y reflexiones de un joven. Por su temática y estructura narrativa innovadora, esta novela puede considerarse precursora de las del Boom Latinoamericano.
Un nombre recurrente en esta obra es Ramón, tal vez se refiera a él mismo pues su nombre es Ramón Rafael De la Fuente Benavides, aunque muy pocos conocían su nombre completo, pues siempre se presentaba como Rafael y nunca utilizó su primer nombre, algunos de sus biógrafos consideran que no lo utilizó debido a la distancia que tenía con la familia de su padre puesto que Ramón era el nombre de su abuelo paterno.
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